Joan Manuel Serrat recibe la máxima distinción de la Generalitat: «Es maravilloso poder sentirse obrero»
La Generalitat de Cataluña entregó este miércoles su Medalla de Oro, la máxima distinción institucional, al cantautor Joan Manuel Serrat por su trayectoria artística y su “profundo compromiso cívico y humanista”, según el comunicado oficial del gobierno catalán. El presidente Salvador Illa describió a Serrat como una figura “absolutamente capital para la cultura catalana y una gran figura de la cultura universal”, y destacó cómo sus canciones han hecho “popular lo universal y universal lo popular”.
En el acto, Serrat recordó sus orígenes obreros y lanzó un mensaje con ecos sociales y democráticos: «Es maravilloso poder sentirse obrero y pertenecer a una clase que dignamente avanza y hace avanzar a un país», dijo. También apeló a la democracia como condición para la convivencia: «Solo con una democracia en justicia y en libertad… encontraremos un camino que nos conduzca al futuro». La ceremonia terminó con la interpretación de El meu carrer, acompañado al piano por Joan Albert Amargós.
La Generalitat entregó además la misma distinción a la actriz Núria Espert; su nieta, la directora Bárbara Lluch, recogió la medalla en su nombre. Illa subrayó que los galardonados representan “compromiso, uno con el arte y la cultura; la libertad y la democracia. Un compromiso con los demás”.
Por qué importa
La entrega de la Medalla de Oro a Serrat no es solo un reconocimiento a una carrera musical de décadas; es una reafirmación del papel de la cultura como factor de cohesión social y memoria colectiva. Serrat, autor de canciones emblemáticas como Mediterráneo y Penélope, ha desarrollado su carrera en catalán y en español y ha formado parte del movimiento de la canción de autor que contribuyó a renovar la canción popular en los años sesenta y setenta.
Su reivindicación de origen obrero conecta con debates actuales sobre las políticas culturales, la justicia social y la educación musical: reconocer a figuras que proceden de contextos modestos pone el foco en la importancia de garantizar que la cultura sea accesible y formadora para sectores amplios de la sociedad.
Datos clave
- Distinción: Medalla de Oro de la Generalitat de Cataluña, máxima condecoración de la institución.
- Galardonado: Joan Manuel Serrat (Barcelona, 1943), cantautor con una carrera de más de seis décadas en catalán y español.
- Motivo oficial: Trayectoria artística y “profundo compromiso cívico y humanista”.
- Acto: Discurso de Serrat reivindicando su origen obrero; interpretación de El meu carrer con Joan Albert Amargós al piano.
- Otro galardonado: Núria Espert; la medalla fue recibida por su nieta Bárbara Lluch.
Contexto y matices
Reconocer a figuras como Serrat tiene efectos simbólicos y prácticos. Simbólicamente refuerza valores de convivencia, pluralidad lingüística y memoria democrática. En lo práctico, plantea retos: ¿cómo traducir ese reconocimiento en políticas que sostengan la creación cultural, la formación musical en la escuela y el acceso a la cultura en barrios con menos recursos? Aquí concurren decisiones sobre financiación pública, programas educativos y medidas para proteger el sector artístico profesional.
No conviene idealizar. Las instituciones que premian deben también rendir cuentas: es legítimo exigir que, además de homenajear, impulsen medidas concretas que permitan que más niños y jóvenes, independientemente de su origen, tengan la oportunidad de formarse en la música y las artes. De lo contrario los homenajes corren el riesgo de quedarse en gestos sin efecto real.
Reflexión final
El gesto de Serrat de reconocerse obrero en un escenario institucional funciona como recordatorio: la cultura crece cuando convive con la democracia y la justicia social. La Medalla de Oro pone en primer plano a un artista que ha traducido sensibilidad poética en canciones que han acompañado a varias generaciones. Ahora corresponde a las administraciones y a la sociedad convertir ese ejemplo en políticas y prácticas que hagan de la cultura un motor real de igualdad y convivencia.